Sueños de navidad

Navidad. Estamos acostumbrados a vivirla con familia o amistades, esperar el aguinaldo, disfrutar, salir y pasear. Algunos, a pensar y sentir pena por personas «menos afortunadas», dar un poco de limosna y seguir viviendo.

Nunca me había gustado esta fecha, estadísticamente hay más suicidios, aumenta la depresión y quién no se ha sentido solo o sola.

Pero esta navidad fue diferente, yo era un jedi. Nunca creí que un pasatiempo, algo que empezó como hobby e incluso como «tontería», tuviera tanto poder. Hablo del cosplay.






Por facebook Richard Salazar publicó sobre una fiesta para niños y niñas en riesgo social y solicitaban a cosplayers. Después de sentir que mejor no participaría (mi traje muy sencillo, pasaba la típica crisis existencial de la temporada y no quería ni salir de la casa), me dí cuenta que hacer reír valía la pena y que realmente no quería que alguien se perdiera de sonreír por estar yo triste.

El 23 de diciembre un bus trasladó a más de 70 cosplayers tomaron parte de su tiempo para compartir con más de 5 mil infantes.

Cada uno vino de diferentes partes del país Alajuela, Cartago, Pérez Zeledón, Limón, San José; personificando a personajes famosos como Superman, Flash, Ironman, Spiderman personajes de anime, video juegos, steampunk, princesas, ponies, Alien, jedis, siths, entre otros; todo para llevar amor, ilusión y hacer sonreír a más de 5 mil infantes.

Luego el 24, nos distribuimos, algunos visitaron el Hospital Nacional de Niños, mientras que otros fuimos a Pavas a continuar con la navidad.

Sinceramente, le tengo miedo a las multitudes… a los niños y en especial a las multitudes de niños. Llegamos al salón comunal; improvisar juegos, tomarse fotos, repartir regalos.

Uno no puede decir que está preparado para esto, al menos, claro… que estés preparado  🙄 …

No hay palabras que puedan explicarlo, simplemente la mejor navidad de todas. En ese momento no eres tu quien hace la magia, es la fantasía inocente de quienes se acercan porque están seguros que eres ese héroe que solo han visto en televisión. Alguien importante te está visitando, compartiendo y jugando contigo.

Miles de niños, niñas y adultos que por un momento ven la personificación de iconos, de sueños y ficción.

Eso es parte de ser humano, estar ahí, dar lo que tienes para cumplir los sueños de los demás, mientras ríes y disfrutas. Compartir en alegría. Por primera vez en muchos años, sentí que por fin estaba viviendo el significado de la navidad.

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